Métodos para diseño instruccional estratégico efectivo

Diseño Instruccional: Una herramienta efectiva para avanzar en la carrera como educador

El diseño instruccional se ha convertido en un elemento fundamental en la planificación y ejecución de experiencias de aprendizaje efectivas en la educación en la era digital. Tanto para educadores tradicionales como para aquellos que han transicionado a entornos digitales, aumentar las competencias y habilidades en diseño instruccional no solo es esencial para mantenerse al día con las demandas educativas contemporáneas, sino también para avanzar profesionalmente y mejorar el rendimiento estudiantil.

En este blog exploraremos cómo el desarrollo en diseño instruccional puede contribuir al avance profesional de los educadores, algunas de las mejores prácticas en esta área y otras herramientas escenciales para lograr el éxito como docente y los mejores resultados para el estudiante.

Beneficios de un Diseño Instruccional estratégico

  • Mejora la Efectividad Educativa: Un diseño instruccional sólido se traduce en experiencias de aprendizaje más efectivas, en las que los objetivos de aprendizaje se alcanzan de manera más eficiente y los estudiantes están más comprometidos y motivados.
  • Adaptación a Educación en la Era Digital: En un mundo cada vez más digitalizado, el diseño instruccional proporciona las herramientas y estrategias necesarias para crear experiencias de aprendizaje que aprovechan al máximo la tecnología en la educación disponible, desde plataformas en línea hasta recursos multimedia interactivos.
  • Mejora de las Habilidades Pedagógicas: El diseño instruccional implica una comprensión profunda de los principios de enseñanza y aprendizaje, lo que lleva a una mejora en las habilidades pedagógicas de los educadores, tanto en entornos tradicionales como digitales.

Tipos de Diseño Instruccional a través de la historia

Modelo ADDIE: (Analyze, Design, Develop, Implement, Evaluate) Este modelo fue desarrollado en la década de 1970 y sigue siendo utilizado en el diseño instruccional debido a su simpleza y efectividad. El modelo sigue un enfoque sistemático de cinco fases 1) Análisis, 2) Diseño, 3) Desarrollo, 4) Implementación y 5) Evaluación, que constituye una propuesta estructurada y sencilla que guía a los diseñadores instruccionales a través de cada etapa del proceso de diseño.

Este modelo sugiere que antes de empezar a diseñar cualquier tipo de contenido o estrategia formativa, es indispensable abordar la etapa 1) Análisis. Es entonces cuando el docente debe responder a preguntas cómo cuál es el objetivo de esta capacitación, por qué o para qué lo vamos a hacer, qué tipo de cambio se busca, cómo contribuirá este material al entrenamiento y el desarrollo efectivo de competencias y habilidades, entre otras.

Una vez culminada esta etapa se pasa al 2) Diseño del material didáctico. Con la información recolectada en la fase anterior, se inicia una estrategia de enseñanza que incluya métodos de entrega, estructura, material de apoyo, duración, evaluación y retroalimentación.

La etapa 3) Desarrollo sugiere la creación de los cursos. Todos los elementos del entrenamiento deberán ser coherentes con el resultado de la etapa 2. En este momento el marco conceptual, la estructura y en núcleo ya estan definidos, lo importante en este momento es agregar todos los elementos correspondientes y el nivel de detalle necesario para pasar a la siguiente etapa.

4) Implementación. Este es el momento de compartir el material institucional con los alumnos. En esta etapa se involucran otros factores como la plataforma en la que se cargan los contenidos, el número de participantes que tendrá el programa, cuánto tiempo tendrán para cada etapa sugerida y otros factores propios de cada entorno.

5) Evaluación. Como lo mencionamos inicialmente, uno de los objetivos de este método de diseño instruccional es proporcionar una estructura sencilla para crear programas de formación efectivos, es por eso que la fase final es tan importante como las anteriores. La evaluación de los participantes para verificar la completa apropiación de los contenidos es fundamental, pero lograr comentarios que retroalimenten la experiencia educativa y faciliten la revisión y mejora de los contenidos también lo es.

Modelo SAM: (Successive Approximation Model) o Modelo de Aproximación Sucesiva es un enfoque interactivo y colaborativo mucho más moderno que el anterior. A diferencia del modelo ADDIE, que es lineal, este modelo contempla el diseño instruccional como un proceso cíclico y flexible que se centra en la colaboración entre el diseñador instruccional y el cliente para crear soluciones de aprendizaje efectivas de manera rápida y eficiente.

Para ello se enfoca en tres pilares fundamentales: Preparación, Diseño Iterativo e Implementación.

Durante la Preparación, se realiza una evaluación inicial para identificar las necesidades de aprendizaje que abordará el curso. En este momento el diseñador instruccional se reúne con los educadores y potenciales estudiantes para definir los objetivos del curso.

En la fase del Diseño Iterativo se desarrolla un prototipo inicial, que se basa en la información recopilada durante la fase anterior, y se pone a prueba y revisión. A lo largo de un proceso de pilotos que se realizan con este prototipo, se recopila retroalimentación que permita modificar la propuesta inicial hasta alcanzar una versión óptima.

Aunque podríamos decir que la Implementación es la fase final de este modelo, lo cierto es que después del lanzamiento del curso, SAM sigue teniendo un enfoque colaborativo ya que el contenido es expuesto a retroalimentación y ajustes durante la interacción con lo estudiantes finales. Este enfoque tiene una naturaleza evolutiva que busca garantizar que el material instruccional sea siempre pertinente, vigente, relevante y efectivo.

Modelo TPACK: (Technological Pedagogical Content Knowledge) o (Conocimiento Tecnológico de Contenidos Pedagógicos). Este modelo integra el conocimiento tecnológico, pedagógico y del contenido para diseñar experiencias de aprendizaje efectivas que se alineen con los objetivos educativos y las necesidades de los estudiantes.

Este modelo fue desarrollado entre 2006 y 2009 y se basa en la combinación de tres áreas en las que los educadores deben formarse con el fin de ser efectivos en el desarrollo de competencias y habilidades en el estudiantado: 1) Conocimiento Tecnológico, 2) Conocimiento Pedagógico y 3) Conocimiento del Contenido.

El TPACK exige una continua actualización de los docentes que contribuya a diseñar experiencias de enseñanza que evolucionen con la demanda de un mundo cambiante, que se adapten a las necesidades de los estudiantes y que implementen la tecnología en la educacion como una herramienta fundamental.

Conoce aquí otras Metodologías de Diseño Instruccional: SAM, Dick & Carey, 4C/ID, Kemp y ARCS

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